Las derechas, las izquierdas…

Tío Eustasio, ¿te acuerdas de las charlas que teníamos sobre las ideologías?
¿Qué no se hizo en nombre de las ideologías?
Matar mucha mucha gente, estigmatizar gentes, dividir pueblos. Son útiles, válidas, sustanciales: dan de comer, hacen crecer intelectualmente, desparraman amor y comprensión.
Usar, sí, usar los jóvenes que, incentivando la mediática “rebelión juvenil” son aprovechados por algunos “próceres” buscando sus afanes de poder.
El otro día pensaba ¿Dónde están los izquierdas adultos?
Escasean. Tienen un problema de deserción similar al escolar o el universitario.
Alguien se puso a analizar las causas?
Si miramos a los maxi adultos… los que vivieron su vida, acumularon la experiencia, esa “cosa” despreciada hoy en día… no son ni de izquierdas ni de derechas. Será por el “alzheimer” que les impacta o dado lo avanzado de la edad se proponen a creer en el cielo, por las dudas, total están jugados?

El otro día, tío Eustasio, veía en un diario ese pensamiento que sostenía Jose Ortega y Gasset en la rebelión de las masas: “ser de izquierda es, como ser de derecha, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil”, pues “ambas, en efecto, son formas de hemiplejia moral. “ ¿La recuerdas?

Y veo que de vez en cuando salen los jóvenes a matar o morir por sus ideales… empujados claro por “maestros jodis”, como te dije.
Si hago una analogía, te molestaría tío Eustasio?
Viste toda esta movida de “reingeniería” en las empresas y la cosa de la “mejora continua”?
Bueno, parece que se hacen demasiadas “reingenierías”… poco de mejora continua. Es que la mejora continua es aburrida, pareciera carecer de acción. O, cuesta demasiado pensar y es mejor romper todo para recomenzar? Para luego quedar donde estábamos o dos metros al costado. Es más vistoso, totalmente.
Y las “reingenierías” son dolorosas. Las revoluciones más.
Además, has visto Tío Eustasio? Son muy sensibles, emotivos: elaboran canciones de lo más románticas que al más racional se le escapa un lagrimón…
Tienen poetas. Y eso es de “pueblo”. Vaya. Al menos de vez en cuando nos podemos emocionar con sus letras y dejar de lado a algunos burgueses que los sellos discográficos impulsan al mercado: volvemos a las fuentes.

Y la romántica foto que Korda le sacó al Che… Absolutamente coherente con su místico romanticismo explotado por todos. Un idealista. No se vendió jamás. Si. Pero de Cipriano Reyes, el hombre que hizo el 17 de Octubre, el hombre que “hizo a Perón”… nadie lo registra. Y desapareció en vida por no “venderse” al General. No ha sido de una gran coherencia? Claro, no tuvo una foto romántica y no murió en alguna escaramuza cruzando el Riachuelo.

Tío Eustasio, al final me fui de tema. Pero hace a esa sobrevaloración de lo romántico, a esa sobrevaloración de idealismos, a esa falta de construcción constante en búsqueda de crecer como humanos. Queremos la paz haciendo la guerra. Incoherencia total!!! Toda revolución comienza gritando colgar a todos los opositores. Tío Eustasio, esos idealismos que los izquierdas profundizan buscando inexorablemente quien está más a la izquierda de quien. Profundizan su individualismo, su fanatismo irracional y su eterna incoherencia.
Ah! Y viste Tío Eustasio? Si hay algo que unifica a todas las izquierdas del mundo es su irrenunciable apego a la moral. Y por ende, a la culpa.
Los izquierdistas, casi por definición, no pueden ser alegres y felices; no, ellos tienen que estar apesumbrados y tristes por el estado del mundo. Es como si dijeran: 'el que es feliz es un traidor! Son melancólicos, sonríen intelectualmente, son irónicos… Todo…todo hasta que son adultos. Allí pasan a “burmanos hugueses”.
Y sí, Tío Eustasio. Las derechas igual. Son quizá menos románticos aparentemente. Pero son iguales. ¿No lo notaste? Carece de sentido hablar de ellos, es repetir.